Poca afluencia de comensales

La situación para el rubro de venta de comida en Rioverde se ha vuelto complicada en el mes de febrero pues a pesar de ser uno de los más privilegiados del comercio, propietarios de diversos negocios han señalado que este mes ha sido aún más difícil que enero registrando una disminución considerable de ventas hasta en un 40%.

Señalan que las razones son diversas, entre ellas la cuesta de enero que se extendió obligando a los comensales a gastar lo necesario, pero todos coinciden en que la baja afluencia de clientes ha afectado su desempeño económico. 

A pesar de la difícil realidad, los empresarios mantienen la esperanza de que marzo traerá una mejora, y confían en que las ventas repuntarán con el inicio de un nuevo mes y la posible reactivación de la demanda.